En los artículos anteriores se ha mencionado como los padres estresan negativamente a sus hijos y las causas que desencadenan tensión en papá y mamá, sin embargo no todo lo que tenga que ver con el estrés es destructivo, muchos estudiosos en el tema han concluido que el ser humano no necesita de una dosis de estrés para vivir. 

Por esta razón en esta época (finalización de un año e inicio de otro) conviene retomar las siguientes sugerencias para que la familia, se convierta en un espacio revitalizador de energías para todos sus miembros y favorezca el desarrollo de cada uno y en conjunto. Las recomendaciones son : 

1. Padres, acepten a sus hijos con sus virtudes y defectos, siéntanse orgullosos de sus fortalezas y oriéntenlos a mejorar sus debilidades, respetando su individualidad. Hijos, acepten a sus padres con su “propio estilo” para educarlos calvez como uno de los dos está más cerca de ustedes, pero esto no significa que el otro progenitor no les ame, mas bien da lo que puede. No le pidan a alguien una virtud o demostración de afecto, que nos está a su alcance brindar, porque no fue preparado para ello. 
2. Padres, la paciencia es un “don” indispensable en la formación con niños y jóvenes. Calmen su angustia y brinden los espacios en lo que a tiempo y cumulo de experiencia se refiere (unos aprenden mas rápido que otros unos aprenden por la via del conejo y otros por la via del dolor). Hijos, toleren a sus padres, también ellos experimentan instantes de tristeza o decepción, el mismo cansancio los lleva a tomarse un momento para sí mismos. La proxima semana brindaremos otras tres claves de oro.